martes, 27 de abril de 2010

RECIEN AHORA



te conocí como tantas veces
un martes por la noche
tu dentro de una caja
que yo desenvolvía como regalo

ponía más fuerte el volumen
y te traían con trajes de noche
con primeros planos sobre tu cara,
para fundirse en tus ojos profundos

cantaste cosas originales
te fuiste hasta los treinta con Nina
y volviste al presente con Creep
ibas y venías, llena de oscilaciones

te maltrataron delante de millones
dejaron huellas en mí algunas interpretaciones
y te quise fuera del circo, lo antes posible
pero hasta el final, tuve que esperarte

y dejé que se cayeran del escenario
algunos por accidente, otros por indiferentes
dejé que empezaras de nuevo
a cantar tu sola, tus canciones

y pasaron los meses, empezó la gira
las hacías propias, pero no eran tuyas
hasta que un día pude escuchar
solo tus historias, solo tus acordes hechas canciones,
solo tus versiones de la historia

que lejos quedaron las escapadas en la siesta
que fuerte la imágen de tu abuela tan pendiente
las cartas, los mensajes de apoyo, conocerte
la ilusión, las entrevistas, los conciertos

tu mirada única, tu sonrisa inolvidable
tus palabras sinceras, el perfume de tus letras
verte crecer en cada esquina, verso tras verso
los que se sumaron sin dudarlo

los que tenían prejuicios, los que se fueron
los que se quedaron, los humildes,
los que les sobraba protagonismo
los que aprendieron a seguirte,
en la distancia corta y en la larga

Con todos quisiste quedar bien
y te diste cuenta de lo imposible de la empresa
con todos quisiste reir, aunque quisieran poner muecas
los llevaste a tu terreno, a tus letras

te vi cantando a los Beatles siempre
y saltando como un niño
después de recibir su regalo de reyes
en Clamores en I Call your name

no te pareces en nada a la chica del casting
no eres ni por asomo la del programa
no podría definirte entre los temas del principio
solo sé, que ahora, recién ahora, eres tú

y te veo con la sonrisa más perfecta
con la ilusión de tu vida
con tus labios llenos de música propia
y unas ganas enormes de comerse el mundo

que te prepare la abuela la mesa
yo llevo los cubiertos de plata
empecemos por el principio
tu ya sabes mi nombre, el tuyo
ha quedado claro, lo tengo en los labios

te llama la historia
te llamas Virginia
no importa el tiempo que nos lleve
que todo el mundo se aprenda

dos sencillas palabras
para empezar una buena canción
solo nos basta empezar diciendo;
Virginia Maestro

1 comentario:

  1. Hola Martín, es bien cierto, solo dos palabras bastan para definir lo que vayamos a escuchar a continuación, VIRGINIA MAESTRO.
    Dos palabras que con solo escucharlas se me ilumina la cara, se me borra cualquier pena que me acontezca y por unos instantes, ella es solo mía, su voz me envuelve para traspasarme luego.
    Muy bonita esta entrada Martín, con razón la has puesto en su FB, esta va dirigida solo a ella.
    Bss

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