
me olvidé de todo
dejé que el río me llevara
y la mar me trajo de vuelta
hasta la orilla de mi propia casa
miro el equipaje roto
las arenas y las caracolas
las estrellas de mar de mi amuleto
y las piedras preciosas
la alarma de un reloj anuncia
que los días se han terminado
que empieza una noche larga y oscura
para la que no vislumbro días claros
el deseo va por una calle
y la realidad se empeña
en ir en sentido contrario
y me paro en medio de la carretera
saco el mapa y leo en el cielo
lo más importante y no es clima
abro el paraguas y empiezo camino
nadie sabe dónde vive mi destino
no quiero nada más
no busco nada menos
el papel y la luz de perfil
entre frases que no quiero oir
porque duelen los dedos
cuándo toco el corazón herido
en mil pedazos se evapora
y se eleva lejos de mí
no tengo fuerzas para la defensa
sin querer me hice vulnerable
y abrir los ojos es tan importante
que me alegra perder el último tren
no soy piloto de Top Gun
ni dueño de la Renfe
no tengo aviones de verdad
solo papeles que viajan más allá
no me quejo de los resultados
y no busco las marcas en las ropas
solo quiero el contenido verdadero
debajo de una piel sincera
nunca mentí lo que percibía
y no es ahora el momento de fingirlo
miro el tráfico al lado del camino
y dejo que las agujas giren
y giran sin contemplaciones
por mi cuello haciendo cosquillitas
por los pies descalzos,
a pesar del frio y el dolor en los huesos
no se detienen y no preguntan
solo quieren consumirme
y me dejo carcomer por ellas
sin números ni fechas concretas
la mochila por momentos pesa
la vajilla no me importa lo que cuesta
si se rompe, es parte del decorado
si no buscas nunca encuentras
mi ministro de defensa
me busca una salida digna
y no se si la ventana es una alternativa
renuncio a la responsabilidad
de encontrar todas las respuestas
nunca quise las medallas
que otros me quieren colgar
ni prentendo recompensas
por los tesoros descubiertos
hoy solo necesito
que me regale el mundo algo de paz
entre el jefe y la empleada doméstica
que no me pidan nada más
que si me cruzas por la calle
me regales un saludo
y una despedida, yo haré lo propio
sin misterios que ocultar
no todos los días hace sol
ni todas las noches son luna llena
pero en estos días de bajón
no espero que la sangre llegue al río
cuál fue mi pecado?
y cuál es mi sentencia?
los molinos de viento giran
y Sancho por fin me despierta
¡Despierta, el juego ha terminado!
miro los puntos acumulados
y los canjeo por otro viaje al fin del mundo
preparo las maletas, game over, game over
Y me voy de crucero
a mi corazón interior
allí me refugio por el invierno
hasta el próximo cambio de estación
dejé que el río me llevara
y la mar me trajo de vuelta
hasta la orilla de mi propia casa
miro el equipaje roto
las arenas y las caracolas
las estrellas de mar de mi amuleto
y las piedras preciosas
la alarma de un reloj anuncia
que los días se han terminado
que empieza una noche larga y oscura
para la que no vislumbro días claros
el deseo va por una calle
y la realidad se empeña
en ir en sentido contrario
y me paro en medio de la carretera
saco el mapa y leo en el cielo
lo más importante y no es clima
abro el paraguas y empiezo camino
nadie sabe dónde vive mi destino
no quiero nada más
no busco nada menos
el papel y la luz de perfil
entre frases que no quiero oir
porque duelen los dedos
cuándo toco el corazón herido
en mil pedazos se evapora
y se eleva lejos de mí
no tengo fuerzas para la defensa
sin querer me hice vulnerable
y abrir los ojos es tan importante
que me alegra perder el último tren
no soy piloto de Top Gun
ni dueño de la Renfe
no tengo aviones de verdad
solo papeles que viajan más allá
no me quejo de los resultados
y no busco las marcas en las ropas
solo quiero el contenido verdadero
debajo de una piel sincera
nunca mentí lo que percibía
y no es ahora el momento de fingirlo
miro el tráfico al lado del camino
y dejo que las agujas giren
y giran sin contemplaciones
por mi cuello haciendo cosquillitas
por los pies descalzos,
a pesar del frio y el dolor en los huesos
no se detienen y no preguntan
solo quieren consumirme
y me dejo carcomer por ellas
sin números ni fechas concretas
la mochila por momentos pesa
la vajilla no me importa lo que cuesta
si se rompe, es parte del decorado
si no buscas nunca encuentras
mi ministro de defensa
me busca una salida digna
y no se si la ventana es una alternativa
renuncio a la responsabilidad
de encontrar todas las respuestas
nunca quise las medallas
que otros me quieren colgar
ni prentendo recompensas
por los tesoros descubiertos
hoy solo necesito
que me regale el mundo algo de paz
entre el jefe y la empleada doméstica
que no me pidan nada más
que si me cruzas por la calle
me regales un saludo
y una despedida, yo haré lo propio
sin misterios que ocultar
no todos los días hace sol
ni todas las noches son luna llena
pero en estos días de bajón
no espero que la sangre llegue al río
cuál fue mi pecado?
y cuál es mi sentencia?
los molinos de viento giran
y Sancho por fin me despierta
¡Despierta, el juego ha terminado!
miro los puntos acumulados
y los canjeo por otro viaje al fin del mundo
preparo las maletas, game over, game over
Y me voy de crucero
a mi corazón interior
allí me refugio por el invierno
hasta el próximo cambio de estación
Hola Martín, ya sé que yo sé poco, que hay mucho de oculto que no puede ser desvelado, que además es algo del todo necesario, no todo puede salir a la luz, no es aconsejable que así sea.
ResponderEliminarHay una estrofa de tu poema que me ha llamado extrañamente la atención, es esta,
** nunca quise las medallas
que otros me quieren colgar
ni prentendo recompensas
por los tesoros descubiertos **
Solo decirte con respecto a esta parte, que te entiendo muy bien, uno hace las cosas porque quiere hacerlas, porque hay algo imperioso que te empuja a realizarlo pero más por satisfacción personal, no mundial.
Si estás de bajón tal como dices, anímate querido amigo, sinceramente te lo digo.
Bss
Unos viven, otros sobreviven.
ResponderEliminarNos quedaremos con nuestra realidad: sentimos. Las circunstancias que no elegimos nos obligan a luchar. Es bueno saber que existe más mundo. Algún día viajaremos allá juntos. Porque queremos creer que nada dura eternamente, sobre todo lo malo. ¿Verdad?
Sabes que tienes nuestro apoyo, no importan los kilómetros, nuestro cariño y nuestra admiración incondicional. Bajón legítimo, por supuesto. Pero eso no cambia nada. Te queremos
me duele el corazón (literalmente)
ResponderEliminarquienquiera que sea, o lo que sea que te hace daño
¡no me cae bien!
tal vez sean malos ententidos?
a veces sucede que los hechos o las palabras, no son totalmente ciertos o sinceras.
por ejemplo; te dije que aquí hacía sol, era cierto, pero no te conté que permanací durante todo el día a la sombra, y que hacía un frio de muerte.
un abrazo!
i...
Es que sos demasiado bueno para ser verdad. Por eso los que nos consideramos tus amigos estaremos siempre, en las buenas y en las malas. Un beso de madre adoptiva, gigantón.
ResponderEliminarKanet
ResponderEliminarsiempre estoy animado pero un día es un día
Río
nosotro sobrevivimos, pero de qué forma !!!!!
i...
el día menos pensado sale el sol jeje
Monica
no soy de verdad es todo virtual te lo prometo!!
saludos M.